A los niños les gusta estar de vacaciones. ¡Son curiosos, emprendedores y activos! La actitud perfecta para una estancia exitosa de varios días en La Sonrisa. El pueblecito de Hedeso ya apela de por sí enormemente a la imaginación. ¿Cómo han vivido todos en esas casas? ¿Adónde lleva ese sendero? No hay peligro de coches, y una piscisa deliciosa para jugar en ella. Pero también las excursiones que se pueden hacer en el día gustan mucho a los niños. Al precioso castillo de Frías, al que se puede subir hasta arriba del todo, o descubrir un monasterio abandonado. Los muchos riachuelos con rápidos que se encuentran de camino pueden proporcionar variación y esparcimiento. Y si hace mucho calor, el mar no está lejos: un día de playa será entonces una opción tentadora. También hay sitios donde usted o los niños pueden montar a caballo. ¿O alguna vez les gustaría sentarse en el tractor de un campesino? ¿Ha visto durante el día unas hermosas imágenes talladas en una vieja iglesia? Entonces podrá intentar reproducirlas “en casa”¡con piedra auténtica! En pocas palabras, el Hotel Rural La Sonrisa también resulta unas vacaciones auténticas para los niños.